7 jun 2009

COMPA MOYO


Moyo Cisneros "El Tigre que come gente"



Hemeregildo "Moyo" Cisneros Pérez nació el 15 de julio de 1952 en Calobre, provincia de Veraguas. Durante su juventud, visitó varias veces la capital de Panamá para trabajar, pero nunca se pudo ambientar al estilo de vida de la gran ciudad, por lo que siempre regresaba al monte, a su terruño, para dedicarse a la agricultura.


A pesar de haber estudiado sólo hasta 6to grado por pobreza, siempre fue un asiduo lector. Todo material impreso que encontraba, lo leía una y otra vez. Los versos eran sus preferidos, a tal punto que los copiaba para luego memorizarlos. Las primeras cantaderas que Moyo escuchó fue por radio, que se transmitían desde el Festival de La Mejorana, donde oía con atención el canto y rima de trovadores como Min Acevedo y Agustín Rodríguez en la modalidad llamada "Cantadera de Décimas". Todo lo que escuchaba se lo aprendía ya que siempre ha tenido una mente "ligera". Su mayor admiración ha sido siempre la voz potente de Bolivar Barrios, al cual intentaba imitar cuando en sus juegos de adolescente se reunía con los amigos en las quebradas y llanos a cantar versos, pero su voz nunca ha sidp extraordinaria ni su saloma vibrante. A pesar de ello y sabiendo aprovechar sus virtudes, la pasión por su afición lo ha hecho ganar un lugar importante en la lista de Trovadores de Décimas de Panamá.


Sus primeros intentos
Tras muchos viajes de leña de 2 reales (cargándola a 10 cent. cada viaje), logró ahorrar B/. 10.00 para comprar su primera guitarra pues deseaba aprender todo lo relacionado con la Cantadera de Décima. Cuando la tuvo en sus manos, se percató que no era cuestión de sólo charrasquear las cuerdas. Poco a poco fue aprendiendo a tocar sus primeros torrentes, logrando también escribir sus propias décimas.


En el año de 1975 llegó a Calobre el Dr. Carlos Fernando Flores, un salvadoreño aficionado a la poesía, quien pronto conoció a Moyo para compartir sus composiciones líricas. Desde que Carlos conoció la Décima, su producción artística se hizo masiva y Moyo aprovechó todos estos versos. Bien se puede decir que fue el guía, mentor y consejero de Moyo para sus primeras presentaciones en las tarimas pues había estudiado teatro y le enseñó desde cómo modular y aprovechar su voz hasta cómo mantener el porte en el escenario. Las prácticas que hacían eran en vivo cada vez que iban a una fiesta o parranda, lo que ayudó a que poco a poco Moyo fuera ganando una reputación.
Su primer contrato para una Cantadera fue en El Espavé de Natá, provincia de Coclé, donde cobró B/. 30.00 para cantar con Prospero "Papo" Ortega. El éxito hizo que se realizara tiempo después una revancha que se transmitió por Radio Poderosa. A partir de entonces, Moyo empezó a presentarse por varias provincias con cantadores de la talla de Toñito Vargas y Bebito Vargas, ayudando así a difundirse su fama. En una ocasión, se le consultó al cantador de décimas Agustín Rodríguez si conocía a un nuevo cantador de Veraguas llamado Moyo Cisneros para ver si podían presentarlo en la Tarima del Cosita Buena, a lo cual respondío: "Ajo, ese muchacho come gente".


La historia a partir de esa primera cantadera en Panamá, realizada en 1982 al lado de Fran Guitierrez y en donde Rubén Dario Campos le bautizó como "El Tigre que come gente", es ya por todos conocida. Moyo ha sido el primer cantador de la provincia de Veraguas y siempre ha mantenido presente en sus improvisaciones el paisaje donde creció, principalmente en sus conocidos ataques del "Gallino Picao" donde contesta a sus rivales de la tarima con virtuosas rimas sin ambajes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

poetachebonilla@gmail.com